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Para blanquear la ropa amarillenta sin lejía, prueba estas soluciones naturales:
1. Vinagre blanco: Frota las zonas afectadas con vinagre blanco y déjalo actuar hasta dos horas antes de lavar como de costumbre.
2. Limón y sal: Mezcla el zumo de dos limones con 2 gramos de sal en agua tibia para un lavado de manos rápido y eficaz.
3. Peróxido de hidrógeno: Diluye una parte de peróxido de hidrógeno en media parte de agua caliente, deja la ropa en remojo unos minutos antes de lavarla y aclararla.
4. Jabón de Marsella: Enjabona la ropa con jabón de Marsella y déjala durante una hora antes de frotar y aclarar.
5. Cáscaras de huevo: Pon cáscaras de huevo en trozos pequeños en un calcetín y añádelas al tambor de la lavadora.
6. Leche en polvo: Sumerge la ropa en una mezcla de agua y leche en polvo durante una hora antes de lavarla.
Prueba estos métodos sencillos y eficaces para devolver la blancura a tu ropa sin productos químicos agresivos.